El soufflé es un platillo tradicional de origen francés que se puede elaborar con varios ingredientes. Sin embargo, todas estas variantes poseen una base común, es decir, claras de huevo a punto de nieve. El término soufflé proviene del verbo francés souffler que quiere decir soplar, dado que cuando se hornea se infla, queda esponjoso y sumamente ligero.
Ingredientes
- 500c.c. de salsa bechamel
- 750g de zanahorias
- 100g de queso rallado
- 6 claras
- 3 yemas
- Nuez moscada, sal y pimienta negra molida
Elaboración paso a paso
- Pela las zanahorias y rállalas finamente.
- Cocínalas al vapor, o bien, saltéalas en una sartén con teflón, para que despidan el menor líquido posible.
- Únelas en un bol con la salsa bechamel, las yemas, el queso rallado, la nuez moscada, la sal y la pimienta negra molida.
- Monta las claras batidas a nieve y añádelas a la preparación anterior con ayuda de una espátula con movimientos envolventes.
- Engrasa con mantequilla y enharina moldes de soufflé y cubre el contorno con una tira de papel mantequilla un tanto más alta que el borde.
- Rellena los moldes con el preparado de soufflé hasta casi el borde y cocina durante 15-20 minutos en horno precalentado a 180º C o hasta que estén dorados.
Sírvelos de inmediato, pues es fundamental que se disfrute de un soufflé caliente, recién sacado del horno, pues a medida que el tiempo pasa, el soufflé se deshincha. Recuerda que la primera vez puede que no salga demasiado bien, pero te aseguro que con la práctica podrás elaborar un platillo delicioso. Te aconsejo hacer uso de las mini-coottes de cerámica y servirlo en ellos directamente.
Si te ha gustado esta receta de soufflé de zanahorias, deja tu comentario y visita la categoría Aperitivos para conocer la receta de soufflé de queso un plato tradicionalmente francés.
Imagen: La Nación
