A la hora de hacer una tarta con masa quebrada, según la receta que quieras elaborar previamente, es importante que le des a la masa un horneado en blanco. Hornear en blanco significa hornear la masa una vez colocada en el molde pero sin el relleno. Para ello es fundamental poner un peso sobre la masa para que esta no leve o se deforme. Generalmente cubrimos la masa con un trozo de papel vegetal y sobre él ponemos garbanzos u otras legumbres, pero, hay otra forma para hacerlo y aquí te lo contamos.
¿Hay alternativa al uso de las legumbres para hornear en blanco?
La respuesta es que sí. Existen diversos tipos de accesorios para ejercer como peso sobre una masa de tarta como las bolas sueltas, los discos de acero, las cadenas de bolas, etcétera. Sin embargo, estos accesorios cuestan una monedita, por lo que si deseas cuidar tu bolsillo existe otra alternativa súper económica: usar otro molde para hornear la masa en blanco.
En estas imágenes extraídas del blog King Arhtur se puede observar que dispone de dos moldes iguales: uno de ellos lleva la masa y el otro la cubre para hacer peso. Sin embargo, para que esto funciones es importante engrasar muy bien el molde de arriba para que no se pegue a la masa, o bien colocar una lámina de papel vegetal sobre la masa.
Deja enfriar en la nevera durante 30 minutos y, posteriormente, da vuelta el molde superior y hornea durante 20 minutos en un horno precalentado a 180 °C.
Retira el molde cuidadosamente y pincha la masa. Llévala nuevamente al horno durante 15-20 minutos, hasta que esté dorada.
Este truco de cocina para hornear en blanco es muy útil, sobre todo cuando queremos hacer tartas donde el relleno llegue hasta el borde como es en el caso del pie de limón o tarta de merengue y limón.
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