Cocinar puede ser maravillo aunque a algunos le parezca una tarea hercúlea que ni en sus mejores sueños creen poder lograr. No obstante, ¿hacemos las cosas como deberíamos? A veces por desconocimiento, otras por ir con prisas cometemos determinados errores en la cocina que podrían solucionarse fácilmente cambiando ciertos hábitos. Por ello hoy vamos a hablaros de los errores más comunes que muchos cometemos cuando nos ponemos tras los fogones. ¿Quieres descubrir si cometes alguno?
1. Cocinar la carne o pescado al sacarla del frigorífico
Se trata de un error tan común, que incluso la que escribe estas palabras es culpable de haberlo cometido. Sacar el pescado o la carne del frigorífico e inmediatamente cocinarlo influye notablemente en la cocción uniforme del producto. Por ello, se recomienda sacarlo al menos media hora antes antes de cocinarlo. De este modo irán tomando la temperatura ambiente y se cocinarán de forma más uniforme, evitando diferencias de cocción en una misma pieza de estos alimentos. Os aseguro que notaréis la diferencia.
2. No probar la comida
Muchas veces cocinamos sin pararnos a probar lo que estamos preparando y luego, cuando el plato llega a la mesa, nos damos cuenta que está soso o que quizás necesita un minuto más de cocción. Probando lo que estamos cocinando podemos solucionar muchos de estos errores que por mucho que miremos la comida y sigamos las recetas a raja tabla no detectaremos sin degustarlo.
3. No dejar reposar la carne
De nuevo las prisas hacen que no disfrutemos de platos más deliciosos. Pues es común que tras preparar una carne, inmediatamente después la llevemos a la mesa y nos dispongamos a comer sin perder tiempo. En parte hacemos esto para que no se nos enfríe el plato, sin embargo la carne necesita de unos minutos para que sus jugos reposen y se repartan de forma homogénea. Por eso, dejando reposar la carne tras su cocción unos cinco minutos lograremos un bocado mucho más delicioso.
4. No calentar bien la sartén
Utilicemos una sartén o cualquier otro utensilio, es fundamental que cuando incorporemos nuestro ingrediente este tenga la temperatura adecuado. Por eso no debemos ser impacientes y calentar, por ejemplo, la sartén bien antes de añadir un buen bistec. Hay que contar con que la temperatura del producto que añadimos no es tan alta y que por poco que sea enfriará ligeramente el recipiente en el que estemos cocinando. Es por ello que si tenemos la sartén a menos temperatura de la necesaria no se cocinará correctamente lo que preparemos. Dejando al menos cinco minutos para que se caliente notaremos la diferencia, seguramente se cocinará antes y el resultado sera el adecuado.
5. Llenar demasiado la sartén
Seguimos con la sartén y es que en numerosas ocasiones buscando terminar rápido lo único que conseguimos es precisamente lo contrario. Poner demasiada cantidad de alimentos en nuestra sartén para cocinarlos, significa que el calor que llegará a cada uno de ellos no será uniforme. Por eso obtendremos alimentos que ya estarán listos junto a otros que necesitan aún más tiempo. Lo mejor en estos casos es prepararlo de varias veces, os aseguro que el resultado será mejor y hasta puede que al final tardéis menos de lo que esperabais.
6. Cocinar de más las verduras
Muchas veces no sabemos porqué nuestras verduras parecen pasadas, demasiado blandas y poco apetecibles, aunque hemos cumplido el tiempo necesario para su cocción. Esto ocurre habitualmente por dos razones, o las hemos cocinado demasiado tiempo, por miedo a que nos queden crudas, o nos hemos olvidado de que el calor residual las sigue cocinando. Para solucionar eso, sobre todo en verduras verdes, lo recomendable es refrescar las verduras al igual que hacemos con la pasta. Esto cambia de golpe la temperatura y frena la cocción para que no se cocine en exceso. Para ello bastará con sumergir en agua fría unos segundo.
— Estos son algunos de los errores más comunes que todos en algún momento hemos sufrido. Pero como habéis visto todos tienen fácil solución. ¿Conocéis otros trucos para evitar estos errores? ¿Hay algo en la cocina que se os resiste y no sabéis por qué? Preguntadnos lo que queráis y contadnos vuestras anécdotas a continuación, seguro que aprendemos algo nuevo.
Totalmente de acuerdo con el punto número 4. La sartén hay que calentarla mucho antes de colocar el alimento, de esta forma evitaremos que se nos pegue. Cuanto más caliente mejor, eso sí, sin quitarle ojo ni un segundo mientras se va calentando. Saludos,
Gracias Nerea por tu comentario, sin duda hay que vigilar bien las sartenes que si no se nos quema y nos quedamos sin ella. 😉