Probablemente alguna vez en tu vida has hecho una infusión… ya sea una manzanilla o una tila y también seguro que al preparar el arroz con leche has puesto la ramita de canela y la cáscara del limón en la leche para darle ese saborcito tan rico y aromático que tiene. Pues lo que has estado haciendo sin darte apenas cuenta es infusionar.
Infusionar es extraer el sabor de una sustancia aromática en un líquido caliente. Es calentar algún líquido con otra sustancia, haciendo que su sabor e incluso el color quede en el líquido. Por ejemplo, cuando hacemos un arroz con leche, infusionamos la leche con la canela y el limón, dando el sabor de estas dos sustancias aromáticas al líquido que en este caso es la leche.
El proceso de infusionar es bastante simple, ya que sólo consiste en calentar el líquido sin que llegue a ebullición, poniendo en él lo que queremos infusionar. Hace unos días, preparé aceite especiado para ponerle a las comidas como aliño, este aceite lo hago con pimienta cayena y orégano y lo suelo usar para darle saborcito a las pizzas o a cualquier ensalada o pasta. Si lo preparas, ojo y no te pases con la cayena, ya que su sabor es muy picante. Simplemente tienes que coger el aceite de oliva y ponerlo en un cazo a fuego muy bajo, junto con unas cuantas pimientas cayena y unas ramitas de orégano fresco. No lo pongas a fuego medio o alto para terminar antes, ya que no se trata de freír las pimientas y el orégano sino de extraer su sabor y que lo tome el aceite, por ello debe estar siempre a fuego bajo, y no dejar nunca que llegue a ebullición.
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¡Un saludo desde Tenerife!
