Seguramente en más de una ocasión te haya pasado de haber tenido problemas a la hora de cocinar pastas. Pero, que no cunda el pánico ya que aquí te enseñaremos cuáles son los ingredientes esenciales para poder prepararlas rápidamente y que queden con la textura que deberían y no hecha pasta, literalmente…
Agua
A la hora de cocinar pastas es primordial que sepas calcular la cantidad de agua, porque si pones menos de lo que deberías, el almidón que la pasta despide podrá generar demasiada espuma e incluso terminar pegando los fideos o los ravioles. Por tanto, considera dos partes y media de agua por una parte de pasta y trata de que la olla sea dos veces más grande que la cantidad de agua y pasta que eches. (Recuerda que por persona se calculan 85g de pastas crudas).
Sal
Cuando el agua rompa hervor será el momento exacto de agregar la sal, ya que de esta manera lograrás disolverla rápidamente. La gran mayoría de los cocineros suelen colocar una cucharadita de sal por litro de agua, aunque la cantidad realmente se ajusta al gusto de cada persona. Puedes hacer uso de la sal que más te guste y de hecho la sal de mesa es la más empleada pero hay quienes usan sal marina o gruesa.
Mantequilla
Generalmente se suelen añadir unas gotas de aceite en el agua para que la pasta no se pegue, pero hay quienes optan por añadir mantequilla para que el resultado final sea mucho más sabroso y para proporcionar también una capa fina a cada una de las piezas de pasta para que las mismas no se peguen y formen una gran bola que luego será difícil de desarmar y seguramente no querrás que eso ocurra si tienes invitados.
¿Sueles respetar las cantidades de agua, pasta y sal? ¿Añades mantequilla o aceite? Deja tu comentario.
