Hoy en el mercado he encontrado con la remolacha, una de las verduras de temporada, de las que ya os hemos mostrado varias recetas. Por ello, he comprado unas cuantas y me he puesto manos a la obra para mostraros esta guarnición que me sorprendió tanto la primera vez que la ví.
La remolacha es una hortaliza que debería convertise en ingrediente fundamental en nuestra dieta. Pues a nivel nutricional nos aporta grandes beneficios. Es cierto que obtendremos de ella más cualidades tomándola cruda, como por ejemplo sus efectos antoixidantes o anti- enfejecimiento que vienen ligadas a la cantidad de ácido fólico, componente que se pierde en la cocción.
Como curiosidad es un alimento que nos ayudará a disminuir nuestro mal humor. Esto se debe a que su consumo participa en el aumento de producción de la hormona dopamina, la cual se encarga de prevenir el mal humos o sintomas de depresión. Así que si a parte de alimentarnos bien, nos ayuda a estar algo más felices ¿porqué vamos a quedarnos sin comerla?
Ingredientes
– 2 remolachas cocidas – Harina – Huevo – Aceite
Elaboración paso a paso
- Lo primero que haremos sera cortar en dados grandes las remolachas. Si compramos las remolachas frescas, tendremos que peladlas y cocerlas previamente entre diez y quince minutos.
- A continuación pasaremos la remolacha, primero por huevo y luego por harina. Lo haremos poco a poco para que queden bien enharinados todos los lados. Intentaremos no tocarlos demaciado, pues la textura de la remolacha no agarra tan bien cómo otros alimentos y puede que al manipularlos se desprendan un poco.
- En una sartén con abundante aceite freiremos la remolacha. Este paso a de ser muy rápido, ya que solo necesitaremos que se tuesten por fuera, pues las remolachas ya están cocidas.
A la mesa
Voilà ya tenemos una guarnición diferente lista. A mi me gusta servirla junto a lechuga variada y aliñada con un poco de vinagre. su sabor seguramente os sorprenderá y será otra forma de introducir verduras en nuestra dieta. Junto con un pescado a la plancha o por ejemplo un plato de pollo puede convertirse en una comida perfectamente saludable y deliciosa.
Y si lo que buscáis es un picoteo para la cena, podéis preparar una ensalada contundente llena de ricos sabores y sumarle la remolacha frita. Sin duda será una perfecta opicón para una cena ligera.
Muy original , habrá que probarlo -.
Gracias por tu comentario, no te olvides de contarnos que te ha parecido cuando pruebes esta receta. 🙂