Hay diversas formas de preparar caldo de pollo, ya sea desde abrir un brick preparado, meter un cubo o pastilla en agua o diversos ingredientes en una olla. No obstante, hacer un buen caldo es fácil y, lo mejor, es que podrás elaborar cantidades grandes y congelarlas para, luego, utilizarlas en esos días desapacibles en invierno. Si quieres congelar caldos, lo único que debes hacer es colocarlos en recipientes isotérmicos aptos para el refrigerador y etiquetarlos con la fecha de envasado. Recuerda que así podrá durar aproximadamente seis meses.
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Elegir buenos ingredientes
Aprovecha las carcasas del pollo, los huesos y los restos de pollo asado para poder hacer un caldo perfecto. Con respecto a las verduras, puedes aprovechar las que tienes en tu nevera, pero deberás tener en cuenta de que estas no se vean marchitas y feas. Lo que corresponde es utilizar alimentos de buena calidad, aunque sean las sobras, pues no se admiten ingredientes en mal estado.
Agua fría
Cuando quieras hacer que un alimento le dé su sabor y sus nutrientes al agua de cocción, deberás partir de agua fría y llevar a cabo una cocción a fuego bajo y durante un tiempo prolongado. Esto se denomina cocción por expansión, mientras que cocción por concentración sería cuando queremos que los alimentos se cocinen sin perder el sabor ni los nutrientes. Para calcular bien el agua, esta debe cubrir holgadamente los ingredientes.
Verduras y especias
Como bien comentaba anteriormente, las verduras deben estar en correcto estado, pero no vale cualquier verdura, dado que las más habituales para preparar caldo son la cebolla, la zanahoria, el puerro y el apio. Además, deberás agregar granos de pimienta, laurel, clavo de olor, comino, tomillo, romero y orégano con mesura.
En cuanto al tiempo de cocción del caldo de pollo, una hora y media o dos será más que suficiente. Sin embargo, si utilizas una olla a presión, puedes preparar un caldo de ave en tan solo 35 minutos. Por otra parte, ve quitándole la espuma al caldo a medida que estás cocinándolo para que no le aporte un sabor desagradable.